sábado, 9 de febrero de 2013
Quimera
Cuando lo devoró
la sombra de las sombras,
nació otra vez
Y voló,
voló
Atravesó la planicie poblada
de novias sin cabeza
y el reino de las cadenas
en un recuerdo,
o tal vez en un derrumbe eterno
sin mancharse si quiera
Se sentía a sí mismo
un vacío bendito,
la batalla concluida que
apenas hacía el amor
con la luz del sol
Entonces se posó
en el alma de una flor de agua salada,
y miró el horizonte
y el horizonte también lo miró
De pronto algo sucedió
algo portentoso
La risa de un niño
se hoyó en su corazón,
y se sintió bandera rota,
trueno bondadoso,
limitación amiga,
lágrima agradecida
Y armado de ternura de grueso calibre
abrazó los universos
al tiempo que asumía lo escrito
en la morena piel de su destino:
sembrar edenes
en cada lamento bípedo
domingo, 29 de abril de 2012
Inconcluso
El horizonte, herido de muerte
por una puñalada que le propinó el miedo,
se arrastra penosamente sobre una
polvorosa planicie.
Anhela llegar hacia una fuente de agua
que se encuentra a unos cuantos metros
de su ubicación.
La fuente es esquizofrénica, y de ella
emergen cometas de rostro humano
que se pierden en un cielo anaranjado.
Pero el infierno aparece de repente
y de un tirón le arranca la esperanza al horizonte,
para luego devorar lo extraído con placer.
Una serpiente intermitente que observa
la escena posada sobre una roca,
llora la palabra "Inconcluso".
martes, 13 de marzo de 2012
La sombra humana
La sombra humana
camina por el desierto de su soledad
y respira el amor y la herida
durante un instante
durante una vida
Su mirada hinchada como luna llena
devora con locura al Cristo
que palpita rojo en el centro del sol
Y el cielo sueña
Y el destino escupe un caballo
de mil cabezas
Tanto tiempo a solas
Tanto tiempo escarbando en la poesía
Y es que nadie comprende su sangre
¡Nadie!
Y naufraga de pronto
en su propio mar, en su propia fe
No obstante un planeta transparente
le alza una mano y todo renace
¡Todo renace!
Los cerebros se arrastran por el suelo
y se masturban ante el gran tótem
de la madre piedra
Colibrís fantasmas surcan el paisaje
¡Nadie!
Y naufraga de pronto
en su propio mar, en su propia fe
No obstante un planeta transparente
le alza una mano y todo renace
¡Todo renace!
Los cerebros se arrastran por el suelo
y se masturban ante el gran tótem
de la madre piedra
Colibrís fantasmas surcan el paisaje
Sus huellas
son profundas como abismos
y se proyectan en las nalgas del paraíso
En otro lado
el colosal espectador
un relámpago vestido de etiqueta
adicto al té
quiere arrancarse los ojos
Lo imposible se derrite como el inconsciente
Y el viento sopla
Llega el fin de repente
La sombra humana
cae de rodillas y se desvanece para siempre
o hasta mañana
y se proyectan en las nalgas del paraíso
En otro lado
el colosal espectador
un relámpago vestido de etiqueta
adicto al té
quiere arrancarse los ojos
Lo imposible se derrite como el inconsciente
Y el viento sopla
Llega el fin de repente
La sombra humana
cae de rodillas y se desvanece para siempre
o hasta mañana
viernes, 9 de marzo de 2012
Animal oscuro
Entre los humeantes escombros del Edén
palpito como bosque de robles en luto
porque soy materia prima del silencio
o más bien bandera apátrida clavada en el rostro de un pálido engendro
Y mi canto podría ser el canto de todos los pájaros
Y mis pasos podrían ser besos al templo en el que daría las gracias
Mas el diluvio divaga a media noche
como rey herido en la cima de una montaña de fe
Suenan las campanas, suenan gallardas
y la luna arde en llamas
Enfrentarme al que enterró su nombre en el cementerio
es parir al héroe genealógico que convertirá moscas en ángeles
Pero ser devorado por la luz es dialogar con el infinito
Hace falta fortaleza que no sé donde hallar
Tomar chicha en un cacho de Satanás, es necesario
Al borde del precipicio mis pensamientos son olas
que rompen allá donde la esperanza destrozó la negra túnica de la muerte
Quiero hacerlo
Quiero hacerlo por mí y por las almas de las nubes
Quiero hacerlo porque yo lo decido
Detener una estampida de moais
Encadenarme al árbol de mi destino
Vacío contra vacío
¡Me lanzo al hocico de lo profundo!
El viento invade mi sangre
mi sangre invade al viento
mientras el áspero sonido de un violonchelo
proveniente desde algún lugar afeita la barba de mis fantasmas
Todo es menos cruel que lo imaginado
De hecho, todo es compasivo
El éxodo emprendido es mejor que un paseo por la vía láctea
aferrado a la cola de un cometa
De repente alguien toca la puerta
Pasa por favor, está abierto
Es una enseñanza octogenaria con forma de No pidas, da las gracias
Mis ojos son la niebla;
soy un difunto en caída libre
Para mí, dormir es convertir la vida en una senda de soles peregrinos
Palpo a mi alrededor
El arcoíris no cesa de soñar, las dudas siguen su cause
De pronto el océano me habla
“Todo huele a vorágine, incluso lo que es
Si no me crees, agrega dedos, los que estimes conveniente
a la mano que te escribe
Ya verás que mi flecha penetra la manzana de la certeza”
Mis ojos recuerdan quiénes son, pero el piano se ha ido de viaje
Queda un vacío en el vientre y las letras picotean la poesía
Me digo flota
El conquistador de la carne y el hueso, a la manera de un Judas amigo
se parte en dos de repente: el bien y el mal
y cabalgo sobre el huracán
Todo está bajo control
La mañana se abre y musas lisiadas y lastimeras
siguen el rastro de una hormiga solitaria
Y pareciera que las murallas están hechas de humildad
porque mientras más hundido, más siento la tierna fragancia del cielo
Según parece, ser propietario del otoño es fortuna
porque en la huerta de mi corazón germina un araucano cósmico
Mientras tanto y hasta el ocaso
la espera se desvanece lento
por la tiránica danza del momento
jueves, 8 de marzo de 2012
De silencio en silencio
Sobre una flor, la última flor del instinto
el día y la noche se abrazaron como lava desnuda
El ojo del huracán se abrió, bebió la luz
que brota eterna desde el centro de sus vidas y todo se remeció
Algo rechina dijo una montaña que se escalaba a si misma
Cuando llegó a su cima descubrió que el sonido provenía
del amor de los amores
Mas todo se congeló menos la creación que fue azotada
por una luciérnaga solitaria
Y emergí desde las profundidades de la nada hinchado de sueños
y heridas atemporales
Lloré, claro que lloré, pero a mis lágrimas las crucificaron en Plutón
por motivos que aún no comprendo
Convertido en estero silencioso por lo acontecido en el hogar del viento
cambié lo divino por un pan pixelado
Los ancestros, con el infierno habitando sus palabras
me gritaron llamas furiosas
pero yo, inmóvil como estatua de eclipses seguí divagando, seguí huyendo
hasta que un astronauta hecho de música me lanzó todos los cometas
de intuición
Entonces comprendí
La muerte es una semilla de luz que se siembra en el huerto de la locura
Eres escalera transparente, la unión tatuada en tu destino
me susurró un fantasma del pasado hacia el presente
mientras iba desvaneciéndose
Y multitud de ciudades caminaron por mi cuerpo, por todo mi cuerpo
Yo sereno sentía su andar y pensaba
Mi piel siempre fue paraíso de amantes infinitos
Pero el precipicio era un corazón que latía como jauría de perros
Y mi otra parte -esa que no es- tuvo miedo
No obstante como si nada hubiese ocurrido yo me arreglaba
el cabello de las épocas sobre lenguas muertas
Pero no podía ni debía seguir soportando el gris murmullo: mi árbol
genealógico ardiendo en llamas
La humanidad entera se detuvo a contemplar un gorrión dorado
que atravesó veloz el éter
Y hasta hoy aún saborea el espectáculo vacuo, mas yo ajeno
estiro mis dedos y muevo el panal gigantesco de profecías
que flota en el más allá
Nadie despierta ni la música
La puerta se ha atascado
martes, 6 de marzo de 2012
Horizonte
El horizonte
no es marioneta de nadie
y jamás lo será
Su libertad
es un vasto y colorido paisaje,
en eterno galope
Tal es la realidad que se observa
a la luz del silencio,
que sin duda alguna
cuando logre sumergir esta gema
en el fondo del calmado lago
de mi aceptación,
el encierro que aplasta y asfixia
perderá peso
porque la jaula
se expandirá
y al fin, ¡al fin!
abandonaré el anhelo
del suicidio humeante de lo exterior,
que solo es el errante espejismo
de un abismo desolado
no es marioneta de nadie
y jamás lo será
Su libertad
es un vasto y colorido paisaje,
en eterno galope
Tal es la realidad que se observa
a la luz del silencio,
que sin duda alguna
cuando logre sumergir esta gema
en el fondo del calmado lago
de mi aceptación,
el encierro que aplasta y asfixia
perderá peso
porque la jaula
se expandirá
y al fin, ¡al fin!
abandonaré el anhelo
del suicidio humeante de lo exterior,
que solo es el errante espejismo
de un abismo desolado
domingo, 4 de marzo de 2012
Grieta
Sobre el cadáver fresco del silencio
bebí tu noche alcohólica
a bocanadas violentas para olvidar
para olvidar la fuga de mis ángeles
hacia el incendio inmortal de la memoria
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